Decálogo de la derecha

La derecha no es nazismo, ni muerte, ni hambre como lo es la izquierda

Suele asociarse al vocablo derecha como una etiqueta de demérito entre aquellos que la ven como amenaza: “todo aquel que no sea socialista, comunista, marxista es de derecha”. Muy poca gente dice ser abiertamente de derecha por prudencia, porque los zurdos son más populares y más agresivos, también porque se ha ligado errónamente a los nazis, mediante el uso del neolenguaje (estrategia zurda para tergiversar términos a su favor).

Pese a que muchos repiten sin cesar que izquierda y derecha son términos obsoletos, con ello se refleja una necia incapacidad para comprender las ideologías y doctrinas políticas, con todo y algunos paradigmas que por supuesto, hay que tomar en cuenta actualmente como por ejemplo: globalismo, crimen organizado, Islam contra Occidente, fake news y el 2.0, etc. (puede interesar leer neotiranía o tiranía 2.0)

La derecha está más vigente que nunca, se refiere a una postura política que refleja un conjunto de ideas basadas en la evidencia empírica y que en suma, protege los intereses individuales. Veamos en detalle 10 elementos de la derecha:

Menos Estado. Quien manda es el ciudadano, las relaciones sociales son privadas, por tanto, no hay burocracia, ni corrupción y en lo sucesivo, hay pocos o cero impuestos. Al quitarle poder al Estado, baja el gasto público y el país no se endeuda. Es la fórmula mágica de la que huye todo estatista.  

Más que un gobierno, impera el derecho. Todos son iguales en la ley ante la ley, eso es democracia. El individuo no necesita que lo manden, saca al partido y al mesías de su vida.

Federalismo. Desde la descentralización del poder, cada ciudad logra su desarrollo con sus recursos y decisiones políticas autónomas.

Propiedad Privada. No se logra ser ciudadano sino se administran bienes propios.

Libertad. De todo tipo, con la única condición de respetar el proyecto de vida del prójimo.

Nada es gratis. Rechaza el asistencialismo. Todo lo que el gobierno da es sacado del bolsillo de los contribuyentes con impuestos. Esto implica que los sistemas de salud y educación quedan bajo la estructura privada y se plantean mecanismos de voucher para personas de bajos recursos.

Capitalismo y libre mercado. La riqueza no se distribuye, se produce y comercia. Este sistema se caracteriza por contener trabajo duro, ahorro e inversión. El banco central es una máquina de imprimir billetes que genera inflación por lo que debe ser erradicado del sistema. Circulan libremente las monedas del mercado mundial. No existen leyes que intenten regular la economía, el mercado se autorregula con las leyes de oferta y demanda.

Protege sus acervos. Tiene que ver con el espíritu patriota y la defensa de las tradiciones nacionales, sin ser enemigo de lo diferente y lejano (parafraseando a F.A. Hayek).

Las relaciones sociales se rigen bajo principios morales judeocristianos infundidos a través de la familia. Beneficencia, no malefícienla y justicia son las bases que todo individuo necesita para salir a la sociedad. Hay libertad de culto, pero se vigilan religiones que ponen en riesgo la paz y el respeto a la libertad, tal como el Islam.

Individualismo. Solo hay tres derechos fundamentales: vida, propiedad y libertad. El orden se mantiene al no otorgar privilegios. La ley se aplica a todos por igual. El individuo al no tener mesías-salvador-todopoderoso que le gobierne, aprende a conducir su vida por sí mismo, sabe quién es, lo que quiere, lo que le hace feliz, etc.

La derecha es la solución ante tanta muerte y miseria que conocemos consecuencia de gobiernos despóticos, porque cada quien es libre de realizar su proyecto de vida sin que alguien le imponga restricciones. De Cuba no salen balseros hacia un océano infestado de tiburones porque la izquierda sea buena, todo lo contrario.

Le invito a romper con el mito de que la derecha es mala y comenzar a desearla para usted, su familia y su país.

Publicado en Mises Report